ionización de la llama en las calderas
El operador industrial de calderas así como el instalador de gas y el instalador térmico en edificios deben tener conocimiento sobre la ionización de la llama en las calderas mediante la sonda de ionización, dicho dispositivo forma parte de los elementos que componen una caldera.
El funcionamiento de la sonda de ionización esta basado en el principio físico de la ionización de la llama. Cuando una molècula pierde o gana electrones decimos que se encuentra ionizada. Durante la combustión del gas las moléculas del combustible se ionizan positivamente, es decir, pierden electrones adquiriendo la propiedad de ser conductores de la electricidad.
Si situamos convenientemente un par de electrodos, inmersos en la llama, entre los que exista una tensión eléctrica, se puede observar el paso de la corriente mediante un galvanómetro debido a la inonización de la llama, esta ofrece una gran resistencia al paso de la corriente por lo que la intensidad que circula es del orden de microamperios. Por esta razón, para que pueda accionar al relé de mando que controla el paso del gas al quemador, debe ser amplificada.
El inconveniente de este sistema radica en que un cortocircuito entre los dos electrodos puede simular la presencia de la llama dejando pasar la corriente y, por tanto, pudiendo dar origen a un accidente.
Para evitarlo se aprovecha una segunda propiedad de la ionización de la llama, que consiste en la rectificación de la corriente que la atraviesa cuándo los dos electrodos tienen superficies muy diferentes (min 1:5). Efectivamente, si se modifica uno de los electrodos dándole una mayor superficie de contacto con la llama, se observa que la intensidad de uno a otro electrodo es considerablemente mayor en un sentido que en otro.
Al ser alterna la tensión entre los electrodos, un analizador de corriente acoplado al circuito, distingue perfectamente entre la corriente alterna de cortocircuito de la rectificada a través de la llama, bloqueando el sistema además de cerrar el paso al gas cuando detecta corriente alterna sin rectificar. De esta forma, el gas sólo puede salir por el quemador cuando existe la seguridad de que va a ser quemado